Acciones de Universo Walsh en el Campus Tandil

“El arte provoca y transforma”, dice el eslogan que se difundió desde la Secretaría de Extensión de la Universidad a la hora de organizar una serie de actividades para estudiantes de escuela secundaria, a cargo del Voluntariado Universitario, en forma conjunta con Universo María Elena Walsh.

En ese marco, la jornada llevada a cabo días pasados en el Campus de la Unicén fue por demás alentadora. Se trató del cierre de una importante serie de charlas, visitas y tareas realizadas en forma conjunta con los adolescentes.

Silvina Latorre, una de las organizadoras desde Voluntariado Universitario (cuya responsable es la secretaria académica Mabel Pacheco), señaló que “previamente se establecieron acuerdos con Inspección General de Escuelas a nivel local”.

-¿Lo que se lleva a cabo es para todas las escuelas del partido?

-No, es para todas las escuelas secundarias con orientación artística, por la afinidad con la temática a desarrollar. Hace ya varios meses empezamos a reunirnos con directivos de esas escuelas, seis en total, para ponerlos al tanto de la propuesta. Acordamos los espacios curriculares posibles para llevar adelante el trabajo previsto.

-¿Cómo continuaron?

-A principios de mayo se realizó una importante reunión informativa a la que asistieron docentes y voluntarios. Se entregó un cuadernillo de sugerencias a los docentes para que puedan tomar contacto con la bibliografía recomendada. Al momento de la capacitación se sumaron a la propuesta docente de otras escuelas, como la Media 10, ex Normal. Por otro lado, se promovió la capacitación de los voluntarios.

-¿Y con respecto especialmente a María Elena Walsh, que es el tema a trabajar para Universo de este año?

-Sí, ese fue el eje del trabajo llevado a cabo en el segundo encuentro de capacitación. Allí nos reunimos para reflexionar acerca de la notable producción de la escritora y poeta, sus cuentos, canciones, su pensamiento, y en general los aspectos más relevantes de su vida. En otra jornada el trabajo consistió en temáticas más específicas, como por ejemplo la visión de María Elena respecto del feminismo, género, la censura existente en la última dictadura y otros.

-¿Cuándo ingresaron en las escuelas para trabajar con los pibes?

-Eso ocurrió en junio. En la primera clase los integrantes de Voluntariado Universitario y demás promotores conocieron a cada docente y a cada grupo y se logró diseñar entre todos, el esquema general de trabajo. En todas las escuelas el eje central fue María Elena Walsh, pero en cada grupo se  abordó una temática diferente, elegida por los alumnos, a partir de propuestas que llevamos.

-¿Fueron positivos los resultados obtenidos?

 

-Totalmente. Puedo asegurar que hacia el quinto encuentro todos los grupos ya estaban abocados a la realización de una producción final que mostrara lo trabajado a lo largo de las clases.

-¿En diferentes rubros del arte?

-Sí. Por ejemplo los chicos de la orientación de Literatura escribieron poesías y ensayos de manera individual y grupal. Los de Música compusieron canciones. Los de Teatro y Danza elaboraron puestas en escena. Los de Historia del Arte y Lenguaje visual realizaron pinturas y dibujos.

-¿Cuáles fueron las temáticas globales que más atraparon a los adolescentes de escuelas secundarias?

-Por lo vivenciado en los trabajos que realizamos, puedo afirmar que los mayores impactos se produjeron en temas tales como la violencia de género, la discriminación y los derechos del niño y la mujer. Entonces, entre otras obras de María Elena Walsh se leyeron los trabajos denominados “La feminista” y “Sepa por qué usted es machista”.

De orientaciones y desconocimientos

De pronto uno de los estudiantes que expusieron en la jornada realizada en el Campus, preguntó a los alumnos de escuelas secundarias acerca de la orientación educacional que estaban cursando, aunque de inmediato alertó a todos los presentes respecto de la cuestión vocacional: “Yo hice un bachillerato especializado en Humanidades y sin embargo estoy en la carrera de Ciencias Veterinarias, así que no es determinante”, aseguró. Y todos asintieron.

Otro alumno, pero de Ciencias Humanas, relató que pertenece a la agrupación estudiantil universitaria “Víctor Jara”. El muchacho preguntó si alguien sabía quién fue Víctor Jara, y el silencio pareció un estruendo. Nadie. Cero en cultura popular, pero sobre todo cero en historia latinoamericana. Ninguno de los chicos de la secundaria tandilense presentes allí, fue informado por sus maestros y profesores que en Argentina y Chile tuvieron terribles dictaduras casi simultáneas y que el cantautor chileno Víctor Jara fue uno de los cinco mil presos, torturados y finalmente matados en el emblemático Estadio Nacional de Chile, donde se jugó, por ejemplo, el Campeonato Mundial de Fútbol de 1962, para felicidad y orgullo de todos los chilenos.

Pero más allá de estas disquisiciones y esta necesidad de revisar los planes de estudio para que los chicos aprendan la historia y el presente, es decir, la realidad, las exposiciones fueron todas muy amenas y llamó gratamente la atención que los pibes y pibas de las escuelas escucharan a sus pares universitarios en un marco de absoluto silencio.