Este planteo se basa en la necesidad de ampliar e incorporar nuevas miradas respecto de la inclusión y el respeto por el otro en la educación superior. Se hace necesario realizar actividades teórico-prácticas puesto que la comunidad en general y la universitaria en particular, debe tomar conciencia, comprender y aceptar la heterogeneidad en un marco de tolerancia y solidaridad mutuo.