El atletismo abrió la 29ª Olimpíada Interfacultades
La entusiasta y bullanguera competencia entre las barras de estudiantes dio antes del mediodía de hoy, en el Campus de Paraje Arroyo Seco, el clásico pregusto a alegría que año tras año ofrece la Olimpíada Interfacultades de la Universidad del Centro, esta vez en su vigésimo novena edición.
Es que cuando el reloj dio las 12, estrenando los juegos de diferentes especialidades deportivas que se prolongarán hasta éste domingo, incluyendo el aspecto cultural, se largaba la carrera de cross para mujeres, primera disputa de la frondosa serie de realizaciones.
Frente al acceso principal del Gimnasio y al borde del Sendero Pampa, con la asistencia del secretario general ingeniero Guillermo Corres, el de Bienestar Estudiantil licenciado Lisandro Ramos, el de Extensión master Daniel Herrero, la dotación completa de la Dirección de Deportes encabezada por su titular profesor José Solimanto, amén de cientos de jóvenes de la totalidad de las unidades de estudio asentadas en Tandil, Olavarría, Azul y Quequén, 49 chicas – el año pasado sumaban 12 – iniciaron la vuelta única de 1.500 metros de extensión por caminos internos y linderos reservada para dicha categoría.
El sostenido viento de unos 30 kilómetros la hora que soplara durante el soleado mediodía resultó el principal escollo para todas las participantes, pero por supuesto no impidió la satisfacción de completar el recorrido que caracterizara a la totalidad.
En primer término, repitiendo la actuación de 2011 y con un tiempo de 7 minutos 40 segundos se clasificó Estrella Suárez, olavarriense que cursa primer año de Medicina y es hija de Juan Suárez, atleta ganador en reiteradas ocasiones de la Tandilia.
La representante de la Unicen el año pasado en los Juegos Nacionales empezó a dominar la carrera al promediar la vuelta. “Al principio traté de conservar sabiendo que en la segunda mitad tendría viento en contra, pero enseguida me solté y creo que hice un buen tiempo. Es una suerte haber vuelto a triunfar”, expresó mientras cambiaba el aire a poco de arribar a la meta.
“Ya lo creo que para mi papá ésta es otra gran alegría y, para mí, una satisfacción muy grande”, completó.
Siempre al son de los tambores y cánticos de las respectivas hinchadas, con cumbias que dominaban los parlantes y un seguimiento a cargo de móviles a lo largo de ambas competencias, además de clasificaciones ordenadas por la profesora Angelina Pilatti, tuvo lugar la entrega de las correspondientes medallas a la atleta ganadora y a sus colegas que completaron el podio, esto es la segunda, Camila Pico, estudiante de Ciencias Económicas (7 minutos 43 segundos), y la tercera, Ailin Ramírez, de Ciencias Exactas.
ALONSO, EN VARONES
De inmediato se largó el segundo cross en el que participaron 70 muchachos. Al cabo de las dos vueltas corridas, completando así 3.000 metros, se impuso Daniel Alonso, estudiante de primer año de la carrera de Relaciones Internacionales, facultad de Ciencias Humanas, quien marcó un tiempo de 12 minutos 45 segundos.
Sólo 24 segundos más tarde llegó Maximiliano Barraza – igual que en la edición 2011 --, de Ciencias Exactas, y en tercera posición, con un tiempo de 13 minutos y 17 segundos Germán Della Maggiora, joven también de Exactas.
Antes de subir al podio reconoció Daniel haber
“manejado siempre la carrera; desde que salimos traté de ubicar un ritmo no tan rápido pero tampoco muy lento y después, faltando unos quinientos metros para llegar a dar la primera vuelta pudo marcar una diferencia cómoda hasta el final. Claro, al ir solo, sin pelotón, el viento me perjudicó mucho”.
“Este resultado – añadió – me abre las puertas a una linda expectativa, ya que este fin de semana competiré en el Campeonato Argentino de Juveniles, en Mar del Plata; el sábado correré 1.500 metros y el domingo 5.000. Trataré de traer una medalla para la Universidad”.
“Hace cuatro años que estoy entrenándome con el profesor Carlos Migueltorena; creo que ahora se están viendo los buenos resultados”, estimó.
Completados los cross, los alegres grupos estudiantiles comenzaron a desplazarse hacia los diferentes sectores en los que se desarrollan competencias de las demás disciplinas. Número y entusiasmo dan, a esta nueva etapa anual de la Olimpíada, un pregusto a éxito final que bien se merece la activa comunidad universitaria.