No siempre nos hemos detenido a pensar en qué es eso llamado suelo, pues puede pasar perfectamente inadvertido excepto cuando en los días húmedos ensuciamos nuestro calzado al transitar áreas no pavimentadas, cuando nuestros hijos jugando lo ingieren por accidente, o nuestros vehículos quedan atascados en algunos caminos, o nos dedicamos a la jardinería y nos ponemos en contacto con él. Algunas personas más curiosas se sorprenden de lo que se ve de ellos en cortes de caminos, y otros se asoman a las gigantescas excavaciones que dan lugar a las fundaciones de algunas obras… sin temor a caer…
Sea cual fuere la idea previa que se tenga sobre él, debemos decir que el suelo es la capa más externa de la corteza de la tierra, pudiendo tener origen natural, aunque puede haber sido parcial o totalmente intervenido por la actividad humana. El suelo es una matriz reactiva con variadas funciones, que exceden la clásica idea de ser el soporte para el crecimiento vegetal. Actualmente se entiende al suelo como medio productivo, hábitat de variadas formas de vida, regulador hídrico y climático, filtro y procesador de sustancias, material para fundaciones y de construcción; por todo esto se lo reconoce como la ¨zona crítica¨ del planeta, impactando de diversa manera en la hidrósfera, atmósfera, litósfera y biósfera.
En los siguientes artículos, producidos para UNICEN Divulga por docentes de la Facultad de Agronomía, se buscará ahondar de manera clara y simple en algunos de estos roles de los suelos, procurando generar conciencia en la sociedad sobre la necesaria preservación de este recurso natural. Los autores esperan poder transmitir a los lectores el profundo amor por la tierra que tienen cada vez que escudriñan en algunos de los suelos que nos rodean...